Al elegir un sistema de techado, se deben tener en cuenta una serie de consideraciones. En resumen, estamos eligiendo uno de los 5 sistemas de techado: asfalto modificado, EPDM, PVC, TPO o KEE. Cada sistema de techado es único en la forma en que se fabrica y ensambla, y varía en precio. Con estas 5 consideraciones críticas, estaremos bien encaminados para encontrar el mejor sistema de techado.
1. Resistencia a los rayos ultravioleta
El techo inevitablemente estará expuesto a los rayos UV. Ciertos sistemas de techado simplemente no pueden soportar los fuertes rayos del sol durante un período prolongado de tiempo, lo que provoca una gran cantidad de grietas. Si deseamos un techo que dure, es imprescindible una excelente resistencia a los rayos UV.
2. Resistencia a impactos
El granizo es una causa común de daños y fallas en el techo, por lo que tener un sistema que mitigue esto es importante para un techo a largo plazo. Con algunos sistemas encontraremos que, con un “techo nuevo”, tendremos una buena resistencia a los impactos. Pero a medida que el techo envejece y se descompone, eventos como el granizo pueden comprometer el techo y provocar la destrucción de los activos.
3. Resistencia química
Todos los techos están expuestos a productos químicos: algunos los podremos ver, otros no. Los techos se descomponen rápida y fácilmente debido a la exposición a sustancias químicas. Algunas exposiciones a sustancias químicas suavizan ciertos elementos de los sistemas de techado, lo que conduce a una descomposición acelerada. Acá es importante asegurarse de que estemos eligiendo un techo que ha sido probado y es verdaderamente resistente a los productos químicos.
4. Resistencia al viento
Al igual que los rayos UV, el viento es un elemento siempre presente. Como regla general, los sistemas fijados mecánicamente con refuerzo de alta resistencia son más fiables que los sistemas adheridos. En este caso en particular, debemos evitar sistemas que se presenten una delaminación por efectos de ambientes agresivos.
5. Resistencia al fuego
El fuego es un criterio fácil de pasar por alto, pero un incendio podría encenderse rápidamente en el techo; un rayo podría caer sobre el techo, una ceniza o un fósforo de los cigarrillos de un empleado, o incluso la electricidad estática podría provocar un incendio. Todos los tipos/fabricantes de techos tienen algún tipo de ensamblaje Clase A que indica cómo se comporta su producto en términos de resistencia al fuego. También es importante tener en cuenta que no existen clasificaciones de resistencia al fuego para las membranas para techos; las clasificaciones se basan en todo el material compuesto que se utilizará y la inclinación del techo.